El estrés es uno de los principales enemigos de la salud emocional y física. Pero el primer problema de este ingrediente es que convivimos con él como algo natural. Damos por hecho que lo normal es estar estresados la mayor parte del tiempo. Algo que es totalmente equivocado. El estrés afecta en nuestra salud y cuanto antes tomemos conciencia de ello mejor podremos cuidarnos. De lo contrario, podemos vivir siempre al límite de nuestra energía, sintiendo que estamos desbordados por tantas tareas y ocupaciones. Siendo esclavos de un sistema que nos hace creer que esta es la única forma posible de vivir.
Consecuencias del estrés en tu salud
1. El estrés altera de modo directo la calidad de tu descanso. Eleva tus preocupaciones de tal modo que las noches se convierten en un paraíso poco relajante. De este modo, inicias una nueva jornada con la sensación de no haber descansado, incluso aunque hayas dormido algunas horas.
2. Estar enfadado de forma crónica y sufrir estrés son dos ingredientes que se dan la mano a modo de causa y efecto. Es decir, el estrés dispara los cambios bruscos de humor, los arrebatos de ira y la frustración. Lo peor es que nos lleva a descargar nuestras frustraciones del modo equivocado y con quien menos culpa tiene. ¿Cuántas veces se descarga en el ámbito privado del hogar, el malestar vivido en el trabajo?
3. El estrés también afecta a tu alimentación ya que puede derivar en una falta de apetito que te lleva a tener una sensación de nudo en el estómago que te deja sin hambre. O por el contrario, puedes experimentar la vivencia opuesta de comer por ansiedad, es decir, comer para llenar una especie de vacío interior que duele. Este tipo de malestar produce cambios de peso habituales, con todo lo que ello implica.
4. El estrés es causa frecuente de dolores físicos habituales como el dolor de cabeza, dolor de tripa o molestias en la espalda.
5. Cuida tu corazón porque es un tesoro. El verdadero ritmo vital está en ese latir que tiene su propia cadencia. Sin embargo, el estrés es el reflejo de cómo con tanta frecuencia vamos en contra de nuestra propia naturaleza para escuchar un reloj distinto: el de la sobreexigencia y la saturación de proyectos que te desbordan como persona. El estrés es un reflejo de cómo a veces nos sentimos tratados como máquinas en lugar de como personas en el trabajo.
6. El estrés es uno de los factores que puede derivar en una depresión porque quien convive con este malestar durante un tiempo, se siente débil y vulnerable.
7. El estrés afecta a la memoria. Es decir, muchos de los olvidos y despistes cotidianos, como por ejemplo, perder las llaves de casa, pueden ser factores que son resultado de la prisa con la que vivimos. La memoria es una capacidad muy importante que debe cuidarse a cualquier edad. Por esta razón, es vital tomar conciencia de cómo el estrés, roba la creatividad.
Sin duda, cometemos muchos errores por estrés, pero sus consecuencias son importantes como para replantearnos estos errores.
