Existen personas que son muy duras consigo mismas a nivel físico, es decir, constantemente se miran en el espejo con ojos de negatividad. Se sienten feas, como si nadie pudiese fijarse en ellas. La realidad es que la belleza física no es lo más importante en una persona y si observas a tu alrededor, incluso en el panorama de los famosos, te darás cuenta que existen muchas personas poco agraciadas físicamente que tienen una relación con alguien muy atractivo.
Cómo dejar de sentirte un patito feo
1. En primer lugar, deja de compararte con los demás porque la belleza es totalmente subjetiva.
2. Intenta potenciar las virtudes que hay en ti: tu simpatía, tu modo de ser, tu sensibilidad… Tú te conoces mejor que nadie, por tanto, piensa en positivo.
3. Cuídate a nivel físico: recuerda que es gratificante hacer deporte, tener una buena alimentación, descansar ocho horas al día, vestir con ropa cómoda…
4. La salud es mucho más importante que la belleza estética, por tanto aprende a dar las gracias.
5. Hoy día existen muchos trucos para disimular pequeños defectos: maquillaje, productos cosméticos, un buen cambio de look…
Aprende a quererte
La belleza tiene mucho poder en la adolescencia y en la juventud porque en esa etapa se tiene una visión más superficial de la vida y del amor. Pero incluso en ese contexto conviene recordar que la persona menos atractiva del mundo puede resultar la más guapa ante los ojos de otra persona.
Cultiva tu autoestima dando valor a todo lo que has conseguido en tu vida. Valora tus éxitos profesionales, cuida tus relaciones de amistad, disfruta de tu trabajo, hazte la vida cómoda en casa… Todo ello te servirá para sentirte mejor.
Si alguien te interesa, no te limites a ti mismo y actúa. Deja conocer a esa persona encantadora que hay en ti.
