Cuando llega el Momento de Decir Adiós en la Pareja

En el inicio de un nuevo año es el momento en el que muchas parejas toman la fuerza necesaria para romper su relación puesto que, coincidiendo con el inicio de un nuevo ciclo surge la expectativa de pasar página con más fuerza. Decir adiós puede ser muy difícil, sin embargo, es lo mejor que puede pasarte si esa relación no fluye y te bloquea. Decir adiós también es un gesto de generosidad hacia el otro, es la forma de expresarle que merece tener un camino mejor ya sea en solitario o en compañía de otra persona.

Cuando llega el Momento de Decir Adiós en la Pareja

Situaciones para decir adiós a tu pareja

Llega el momento de decir adiós cuando se ha producido una infidelidad en la pareja y a pesar del deseo de perdonar ese desliz, en cada discusión vuelve a brotar este hecho. Es decir, cuando no existe un perdón verdadero. Y es que, más allá del deseo, en la práctica no siempre es posible materializar este propósito.

Cuando estás ante un extraño. No importa lo enamorados que hayáis estado si a día de hoy te preguntas constantemente qué fue lo que pudo enamorarte de esa persona a la que ahora observas a kilómetros de distancia a nivel emocional. Los silencios cada vez son más importantes porque sientes que cada vez tienes menos que hablar con esa persona.

Cuando hay más enfados que alegrías. Y también, cuando los enfados duran cada vez más tiempo. En este tipo de situación, debes plantearte qué sentido tiene mantener una relación en la que solo existen peleas y frustraciones. El amor que te hace bien es aquel que suma, no aquel que te quita cosas. Si ya no recuerdas las veces que te has reconciliado con tu pareja después de rupturas breves, no sigas confiando en que esto siempre va a ocurrir. Es agotador tener una relación tan inestable en la que el guión ya está tan marcado y definido.

Cuando tienes una pareja que no se compromete. Es decir, cuando parece un puro adorno en tu vida. Y ese alguien no se compromete como te gustaría. Y quedas a la espera de que algún día te mire a los ojos y se dé cuenta de cuánto vales. Tú no tienes que estar demostrando tu valor constantemente para que tu pareja te haga caso. Porque si se ha enamorado, sentirá este deseo de compartir tiempo contigo de un modo natural.

Cuando su plan de vida es tan distinto al tuyo que te resulta imposible visualizar un plan intermedio que haga que la vida de ambos sea compatible juntos. Por ejemplo, cuando tú quieres casarte y tener hijos pero tu pareja no tiene esta meta. Si eres capaz de renunciar a tus deseos sin que ello te cause dolor, entonces, tal vez puedas continuar con la relación. En caso contrario, es muy difícil, especialmente, es difícil reprimir el deseo de querer tener un bebé si este es tu ideal. Y te gustaría observar en tu pareja, también al padre/madre de tu hijo.

Si estás en un punto para decir adiós, toma el impulso del 2017 como la mejor fuerza para pasar página.

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