Cómo dejar atrás el PASADO

Cómo dejar atrás el PASADO

En la siguiente entrada te brindaremos algunas estrategias útiles para que puedas dejar atrás el pasado. Tengamos en cuenta que el pasado es algo que nos acompaña en nuestra vida. En muchos casos el lugar del que venimos es la base en la que conformamos las personas en que nos convertimos, la manera de actuar y la forma de pensar, además de la manera en que nos relacionamos con el mundo que nos rodea.

Nuestro pasado llega a influir en diferentes aspectos, no solo en nuestra perspectiva de vida sino en muchas cosas más que no pensamos ni imaginamos, como las emociones y los sentimientos que tenemos en diferentes momento o lo que nos genera una persona que conocemos y de la que no contamos información

Las personas tenemos recuerdos buenos y recuerdos malos de nuestra vida, pero existen quienes parecen tener una gran facilidad o tendencia de estar todo el día reviviendo ese pasado, sin pensar en la actualidad ni proyectar nada en su futuro.

Pasar todo el día pensando en lo que ya sucedió, sea bueno o malo, no es la mejor alternativa para poder continuar con nuestras vidas, todo lo contrario. Estas actitudes nos genera que estemos estáticos, no nos deja movilizarnos y nos impide tener energía para los nuevos proyectos o disfrutar del día a día en que nos encontramos.

Cuando el pasado no nos deja continuar nuestra vida se vuelve un problema, los recuerdos sobre aquello que fue o no fue vuelven a nuestra cabeza de forma continua una y otra vez, generando una interferencia con el momento actual en que nos encontramos, impidiendo disfrutar el presente.

En un determinado momento deberemos tomar conciencia de que el pasado ya pasó y que el presente es donde nos encontramos, si bien esta frase parece una obviedad en muchos casos no tomamos conciencia de ello.

Si los recuerdos del pasado no son agradables tenemos que pensar que recordarlos continuamente nos genera daño una y otra vez y no será nada positivo ni productivo. Quienes se focalizan en el pasado todo el tiempo corren peligro de caer en una gran tristeza o depresión, quedarse inmóviles ante el presente o hacia el futuro, un cuadro nada prometedor Esto nos puede generar que nuestra vida se encuentra destinada a la desdicha.

Para poder superar el pasado lo primero que debemos asumir es que no lo podemos cambiar, tendremos que aceptar las cosas como fueron y dejarlas así Para lograr hacerlo deberíamos levantar la vista hacia el mundo que nos rodea.

Pararnos a pensar en cuanto tiempo al día se pasa pensando en los problemas, si consideras que es mucho existe la posibilidad de que estemos centrados en nosotros mismos y que estemos olvidando del mundo que nos rodea.

Un punto interesante de poner en práctica es reflexionar si estamos haciendo trabajar a nuestras neuronas en nuestra contra. Dejarnos de ver como el ombligo del mundo y comenzar a mirar en que sitio estamos.

Otro punto clave es olvidarnos de las personas que nos hicieron daño. Vivir pensando en lo que nos hizo sufrir genera que no podamos cerrar las heridas. Cuando le guardamos rencor a alguna persona no va a generar nada bueno, la otra persona no se sentirá peor y los únicos que sufriremos seremos nosotros.

Perdemos un montón de tiempo y energía pensando en qué le podríamos decir o que hacerle para que ‘pague’ por lo que nos hizo, pero esto solo generará más frustración y nos hará revivir una y otra vez el mismo dolor. Tendremos que asumir que somos nosotros mismos los que más nos perjudicamos al no sacar de nuestra mente a las personas que se portaron mal.

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