Mantener un buen clima emocional en el hogar no es tan fácil como parece. Especialmente si viven bajo el mismo techo personas con personalidades muy fuertes o si la situación económico o laboral no es muy buena. Pese a todo, hacer el esfuerzo para lograr una convivencia armoniosa y fortalecer los vínculos familiares tiene muchas ventajas, es por eso que hoy ahondaremos en algunos tips y consejos para lograr mantener un círculo de apoyo y vínculo fuertes para que la convivencia en el hogar sea más llevadera.
Muchas personas realizan consultas psicológicas por cuestiones familiares. El cariño que uno tiene, en casi la mayoría de los casos, hacia un familiar a veces puede tornarse en situaciones de hostilidad o enfrentamiento cuando pasamos muchas horas bajo el mismo techo. Por ese motivo, la salud emocional en la convivencia es un aspecto a trabajar, a tal punto que se trata de lograr una cierta armonía en base al trabajo constante. ¿Qué podemos hacer para lograr una buena convivencia y un clima amigable en el hogar?
Fomentar buenas prácticas entre los miembros de la familia
Mantener un trato respetuoso y educado hace que las situaciones de roce y enfrentamiento puedan moderarse mejor. Se recomienda no utilizar lenguaje agresivo o hiriente al pedir cosas o entablar conversaciones. Los insultos no deben aceptados como parte del diálogo familiar, y siempre hay que fomentar un tratamiento respetuoso entre todos los miembros. De esta forma se puede alcanzar un clima familiar mucho más estable.
Roles en la casa
Los padres deben ser padres, y no confundir una relación amistosa con un rol diferente en el seno familiar. Los padres son guías, son los encargados de educar a los hijos. El objetivo de sus prohibiciones y permisos debe ser siempre el bienestar y el crecimiento de los hijos. Pero en estos tiempos abundan las relaciones en las que se mezclan los roles y los padres entienden que deben ser amigos de sus hijos. Gran error.
La mejor manera de no caer en un extremo o en otro, es ser padres democráticos. Esto implica ser firmes con determinados límites establecidos, pero dispuestos a escuchar. De esta manera los hijos sabrán que hay una figura que marca los límites, pero a su vez escucha. El objetivo debe ser que los hijos respeten a sus padres, y eso tampoco se logra siendo autoritarios.
Actividades en familia
Otro gran aporte a un clima hogareño estable es realizar actividades en familia. Es importante que haya espacios para la diversión y la actividad en conjunto. Si bien los hijos tienen sus amigos, es bueno generar espacios familiares donde haya diversión, juegos y un poco de alejamiento de las responsabilidades cotidianas. Esto hace que los vínculos entre los integrantes de la familia se puedan trabajar mucho más y de manera flexible. El tiempo de ocio en familia tiene que ser de calidad, no a las apuradas y haciendo cualquier actividad. Sino algo que todos disfruten y que permita generar momentos de alegría y diversión que queden en el recuerdo.
Estos son solamente algunos consejos para alcanzar un buen clima en el hogar. Parte fundamental para el desarrollo personal de los individuos. Respetarse, tratarse con cariño y decirse las cosas, incluso las que nos disgustan, de manera respetuosa hace la diferencia.