De forma muy curiosa los humanos tenemos una gran facilidad para distorsionar la realidad al poner el foco de atención en el punto equivocado. Una persona puede estar cansada de las manías de la pareja pero en cambio, no se agota de sus propias rarezas. Todos tenemos defectos pero somos mucho más indulgentes con nosotros mismos de lo que lo somos con los demás.
Así que cuando te canses de las manías de tu pareja, pregúntate si de verdad eres objetivo y si tu pareja no tolera también actitudes que puede que no le encanten. Quien busca a una pareja perfecta entonces está condenado a la soledad absoluta.
Qué hacer para recuperar la perspectiva
1. En primer lugar, ver por encima de esos defectos para recuperar la perspectiva de lo verdaderamente importante en el amor es un paso fundamental. Lo que de verdad importa es que cuando hagas balance de tu historia sientas que eres afortunado por haber encontrado a esa persona especial en tu vida. Todo lo demás es secundario.
2. Diferencia entre un defecto y algo que no te gusta a ti. Que tu pareja no siempre actúe como a ti te gustaría no significa que tenga defectos. Simplemente, en el amor existe libertad y cada persona actúa con un criterio propio.
3. Si a tu pareja simepre le repites lo mismo y le corriges como si fuera un niño en sus defectos en lugar de animarle a cambiar le estás reafirmando en su actitud. La queja es la peor solución ante un defecto. En cambio, elogia a tu pareja en esas actitudes que te hacen sentir bien de verdad. En vez de quejarte, disfruta de los beneficios psicológicos de los besos.
4. Potencia el sentido del humor para reirte de esos pequeños defectos que hacen que la persona que quieres sea especial y única. La verdadera esencia de lo humano es la imperfección.