En la actualidad existe un gran número de jóvenes e incluso adultos que se han enfrentado con el hecho de ser padre, y es que en muchas ocasiones no es la mejor experiencia,pues cuando se vive una infancia traumática los padres y futuros padres experimentan cambios de humor e incluso preocupación por la nueva responsabilidad adquirida.
Ahora bien, ¿Cuáles son los rasgos de los malos padres? Los especialistas con los años han arrojado un sin fin de signos y comportamientos de los malos padres entre los cuales destacamos:
- Mentir y manipular
- Acusarte de cosas que nunca harías
- Guardando rencor por cosas que hiciste hace mucho tiempo
- Juzgar
- Reteniendo la comodidad
- Empujándote a situaciones de las que solo ellos pueden «salvarte»
- criticando
- Gritos
- Golpear
- Comparando
- Humillante
- Lucha
- iluminación de gas
Además de lo antes planteado, nada es lo suficientemente bueno para los padres tóxicos, no importa cuánto lo intentes: si obtienes A, ¿cómo es que no eres un atleta estrella? Dicen que saben todo sobre ti, pero nunca parecen escuchar cuando tratas de hablar sobre tus sentimientos.
También te comparan con ellos mismos, con tu hermana, con tus amigos y, sin embargo, parecen celosos de cada golpe de suerte que se te presenta. Te humillan frente a los demás y luego insisten en que «solo estaban bromeando». Se pelean entre ellos; luchan contigo. Intentan convencerte de que eres tú, no ellos, el que es mentalmente inestable. Dejan en claro, sutilmente o no tan sutilmente, que lo que está mal en su vida eres tú, y que eran felices antes de que aparecieras.
El impacto de la mala crianza en los niños
Los niños cuyos padres exhiben los rasgos anteriores corren el riesgo de sufrir consecuencias físicas, psicológicas, conductuales y sociales a largo plazo. Las consecuencias a largo plazo del abuso y la negligencia infantil incluyen:
- Diabetes
- Enfermedad pulmonar
- Desnutrición
- Problemas de la vista
- Limitaciones funcionales
- Ataque al corazón
- Artritis
- Problemas de espalda
- Alta presión sanguínea
- Daño cerebral
- Migrañas
- Cáncer
- Carrera
- Enfermedad gastrointestinal
- Síndrome de fatiga crónica
- Disminución de la función ejecutiva y la cognición
- Mala salud mental y emocional.
- Dificultades sociales
- Trastorno de estrés postraumático (TEPT)
- Conductas sexuales de riesgo
- La delincuencia juvenil
- Consumo de alcohol y drogas
- Abuso repetido en la edad adulta
Como consejo los especialistas han recalcado a todos aquellos adultos que de una u otra manera obtuvieron una infancia difícil que lo ideal es asistir a centros de ayuda para que pueda superar los traumas y molestias ocasionadas durante sus primeros años de vida.
Luego de asistir a los especialistas, se recomienda tener a sus niños. Ahora si decide ir ya cuando ya es papá o mamá lo ideal y lo más recomendable es asistir primero solo y una vez esté listo se sugiere ir con los más pequeños de la casa para que expresen cómo se sienten y que les gustaría que su papá o mamá considerara para tener una relación sana y saludable en familia.