La adicción a las drogas es, como muchos especialistas lo remarcan, multi-causal. Esto quiere decir que para entender sus orígenes y tratar mejor al paciente es importante tener en cuenta las diferentes situaciones sociales, médicas, psicológicas y de contexto que pueden llevar a un individuo al consumo de drogas de forma adictiva. En este sentido, los especialistas indican que las causas suelen aparecer en conjunto. Normalmente, cuando dos o más de las principales causas que llevan a la drogadicción aparecen en un individuo, aumenta el riesgo de ser víctima de esta enfermedad.
1. Curiosidad
Parece una palabra inofensiva, pero la curiosidad es una de las principales causas de la drogadicción, siempre unida a otros factores. Los investigadores han determinado que la población joven es la más vulnerable a la drogadicción originada por un consumo curioso de sustancias en base a los estímulos del entorno y los medios masivos de comunicación.
2. Mejoras en el desempeño laboral / educativo / deportivo
Existen algunos ámbitos como el deportivo o académico/educativo donde las personas se sienten obligadas al uso de sustancias estupefacientes para lograr mejores rendimientos. En la mayoría de las ocasiones, estas personas ignoran que aunque la droga sea consumida en momentos específicos o con fines concretos, las posibilidades de que se convierta en una adicción son las mismas que si el consumo fuese en otros ámbitos.
3. Vivencias traumáticas
No todas las personas que atraviesan una situación traumática o de alto contenido emocional necesariamente desarrollan actitudes de drogadicción, pero es uno de los parámetros a tener en cuenta. En muchos casos, el consumo de drogas es visto por las personas como un escape, una salida ante un dolor o una situación externa demasiado dolorosa de sobrellevar.
El consumo de drogas en estos casos se utiliza como distracción para la mente, y termina generando un estado de aturdimiento o relajación. Al final del día, la adicción termina convirtiéndose en un compañero de ruta.
4. Alivio ante situaciones estresantes
Íntimamente relacionado con el punto anterior, la necesidad de relajar y alejar el estrés puede volcar a las personas hacia actitudes propias de la adicción a los estupefacientes. El efecto relajante puede durar un tiempo, pero finalmente la propia adicción a las drogas terminará generando en el paciente tensión y nerviosismo, obligándolo a consumir mayores dosis para tratar de escapar del estrés. Este círculo vicioso es uno de los más difíciles de romper porque termina generando una dependencia extrema al consumo de la sustancia.
5. Imitación o admiración a individuos que se drogan
Este tipo de causa es más común en edad temprana. Implica el inicio en el consumo de drogas y una consecuente adicción a causa de la imitación de determinadas figuras a las que admiramos y consumen drogas. Buscando una mayor similitud al estilo de vida de nuestros ídolos, nos volcamos a acciones aún si estas son autodestructivas.
Estas son solamente algunas de las múltiples causas que pueden llevar al desarrollo de una personalidad autodestructiva y adictiva a estupefacientes y drogas en general. El tratamiento en simultáneo de estas causas y el acompañamiento de familia, amigos y profesionales será una de las grandes claves para lograr salir delante de esta compleja situación de salud.