Los nuevos tiempos y las nuevas tecnologías han traído con ellas también nuevas patologías, como pueden ser las adicciones, como las ya mencionadas de la comida, a los videojuegos, al trabajo, . La adicción al móvil o al ordenador son de las más extendidas, sobre todo entre los jóvenes, pues los hay que no “pueden vivir” sin estos aparatos.
Y es que los niños crecen cada vez más rápido. Ya no juegan al escondite, ahora si se esconden es para que sus padres no los pillen conectados a todas horas, ya no leen libros…ahora lo único que leen son los las conversaciones tecleadas que mantienen con sus amigos y conocidos, por lo que se ha perdido la tradición de ir todos juntos al parque y jugar, ahora está cada uno en un rincón, tecleando sin parar. No se despegan del móvil, ni estando en casa ni estando lejos, no pueden salir sin él (y si se les olvida, vuelven a casa a por él, aunque es poco probable que se les olvide) y ha pasado a formar parte de un complemento tan imprescindible como la ropa.
¿Tanta tecnología es beneficiosa, o por el contrario…nos encierra en un mundo de exclusión y silencio, donde el único sonido es el del teclado del teléfono o la recepción de un nuevo mensaje en el Facebook?