El embarazo es una época de gran alegría y felicidad. Pero después del parto, a menudo la madre no consigue disfrutar al 100% de ese momento que tanto tiempo ha estado esperando. Si esto ocurre, estamos hablando de la depresión por parto.
Las madres que sufren este trastorno se sienten desanimadas, sin ganas de hacer nada, sólo quieren quedarse en la cama sin ningún ánimo. Además, están más irritables de lo normal, y por cualquier cosa se alteran y se muestran de mal humor.No se sabe claramente cuáles son las causas, posiblemente el estrés, el miedo a no hacerlo bien, problemas económicos, todo junto con el cambio hormonal que ocurre. Normalmente, las mujeres consiguen superarlo durante el primer mes después del nacimiento del bebé. Pero algunas veces puede seguir algún tiempo más, perjudicando la calidad de vida de los padres.
En caso de que una madre reciente presente signos de depresión más allá del primer mes, es importante buscar ayuda profesional para poder superarlo cuanto antes, ya que podría tener consecuencias negativas tanto para su vida como para la del niño.
