Es normal sentir miedo y ansiedad en algunas situaciones cotidianas, ello no es necesariamente negativo porque nos pone en alerta ante el riesgo y el peligro. Lo normal es que la ansiedad desaparezca cuando ha pasado la situación de tensión, pero cuando se mantiene y se hace constante será mejor buscar ayuda profesional pues estaríamos ante un trastorno de ansiedad, como puede ser el trastorno obsesivo compulsivo, TOC, entre otros.
Pensamientos obsesivos acompañados con conductas compulsivas
Las personas con este trastorno tienen pensamientos repetitivos durante todo el día sobre algo que les afecta y esa es la obsesión, no son capaces de dejar estos pensamientos e intentan sentirse mejor con acciones repetitivas identificadas como compulsiones.
Las obsesiones pueden ser miedos a ser perseguidos, a oler mal, a estar desaseados. Las compulsiones serán lavarse las manos varias veces en cortos lapsos de tiempo, contar, revisar algún detalle continuamente para chequear que esté bien, limpiar.
Según Biopsicología.net las personas con TOC suelen ser muy perfeccionistas, y les gusta tener el control de las situaciones mediante un apego exagerado a las normas, tanto que pueden quedarse en ello y no alcanzar sus objetivos.
No acostumbran delegar debido a ese afán de perfeccionismo porque piensan que sólo ellos pueden hacerlo bien. El trabajo suele ser otra de las obsesiones y en ello centran sus vidas, el ocio no es una actividad que les agrade e intentan aplazarlas en el tiempo.
En el campo afectivo, son personas poco expresivas y calculan lo que van a decir o hacer.
El TOC es un trastorno que requiere de atención profesional especializada ya que puede degenerar en una alteración de la personalidad.
