Depresión y ansiedad en niños

Depresión y ansiedad en niños

La atención primaria para el tratamiento de la depresión y de la ansiedad en los más pequeños puede generar una gran diferencia. Tengamos presente que en la atención primaria, especialmente en la primer consulta, es una excelente oportunidad para comenzar un buen tratamiento terapéutico.

En muchos casos los médicos solo informan que los niños se sienten ansiosos e inseguros cuando están frente a pequeños que están pasando por una angustia emocional, un estado que podría provocar una especie de desconexión y dejar al pequeño aislado e inseguro.

En la primera consulta que se tenga con el profesional de la atención primaria se debería mostrar un verdadero interés y preocupación por el problema que tienen delante reforzando la importancia de llevar adelante un tratamiento vinculado a los problemas de salud mental. Los profesionales deberían tener una postura sin prejuicios, una escucha atenta, mostrando curiosidad por la historia que tiene delante.

El lenguaje debe ser natural y claro, con un tono de voz tranquilo, es importante que los médicos cuiden el tono que se emplea o usan de forma involuntaria ya que se pueden sentir como una barrera.

Recordar siempre centrarse en el contexto de los pacientes y no solo brindar información. Es necesario contar con los conocimientos y con la empatía para llegar a romper el hielo y así llegar a explorar y conocer cuestiones emocionales más sensibles que puedan presentarse más adelante.

En el caso de los adolescentes siempre se recomiendo consultar acerca del consumo de alcohol y drogas y la actividad sexual, este punto también puede llegar a ser fundamental, pero siempre siendo muy prudente y asando las técnicas adecuadas para abordar estos tópicos.

Tengamos en cuenta que poder establecer una relación terapéutica es necesaria cuando se van a realizar tratamientos a largo plazo. Recordemos la depresión y la ansiedad en la infancia y en la adolescencia pueden ser recurrentes o persistentes. Será necesario investigar acerca de la historia de salud mental de la familia.

Existen diferentes factores que contribuyen a la aparición de la depresión en los pacientes más jóvenes, entre ellos, factores genéticos, factores de personalidad, problemas de salud mental de los padres, conflictos, falta de afecto, enfermedades físicas.

Es importante que tengamos en cuenta que la escuela es un lugar que puede convertirse en un sitio de protección para los pequeños, pero también puede ser un lugar en dónde existan factores exacerbantes para los niños, como momentos de intimidación o dinámica de compañeros estresantes sumado a las preocupaciones académica.

Para poder establecer un correcto diagnóstico será necesario que los profesionales realicen preguntas directas acerca de la persistencia y la severidad del bajo estado de ánimo, el disfrute de las actividades y los pensamientos negativos.

El riesgo psicológico deberá ser evaluado en la primer cita que se tenga con el profesional. Lo ideal es concertar una consulta terapéutica más que una entrevista exhaustiva, será necesario que se llegue a construir un vínculo de confianza. Lo ideal será reservarse, al menos por el momento, de una anamnesis que sea demasiado profunda, esto podría generar que el niño o joven se sienta más preocupado y puesto en alerta.

En un próximo artículo seguiremos hablando acerca de este interesante tema.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí